Neuroliderazgo

El Neuroliderazgo es una una nueva rama científica que estudia las conexiones mentales para aplicarlas a través de una metodología práctica al management, para conocer cuáles son los procesos neuronales que se ponen en marcha durante la gestión empresarial.

Más del 90% de nuestras decisiones las realizamos de manera inconsciente. Y es que la mente humana procesa una ingente cantidad de información por segundo (400.000 bits), aunque tan sólo 2.000 son analizados de forma consciente. Es por ello que los ejecutivos David Rock y Jeffrey Schwartz introdujeron en 2006 el ‘Neuroliderazgo’, aplicando el conocimiento de la Neurociencia al campo del management personal.



Es por ambos que sabemos que, por ejemplo, los grandes ejecutivos que presentan mayor resistencia al fracaso y mejor capacidad de adaptación y superación de situaciones de estrés elevado tienen altos niveles de testosterona y bajos de cortisol. A raíz de esto y ante la imposibilidad de controlar la emisión de hormonas, David Rock establece siete hábitos esenciales para que los gerentes o responsables de una empresa realicen prácticas para aumentar o disminuir los niveles de testosterona y cortisol:

• Focalizar. Cuando un individuo se concentra profundamente en un proyecto o problema aumenta su involucración sobre el mismo, lo que pone en marcha un proceso mental que contribuye al hallazgo de una solución.
• Interactuar. Los grandes líderes no se mantienen aislados del resto de compañeros, sino que se relacionan con todo el equipo humano de la compañía y crean lazos sociales que mejoran su bienestar, su salud y su rendimiento mental.
• Descansar. No es mejor el ejecutivo que trabaja sin tregua, día y noche, los 365 días del año. Tomar días de vacaciones o realizar tareas cotidianas ajenas al trabajo, como ver una película o leer un libro, posibilitan que sus cerebros se recuperen y que las conexiones inconscientes afloren a la superficie.
• Divertirse. En el mismo sentido, dedicar tiempo a los hobbies o pasar ratos con la familia y amigos, mejoran el estado de ánimo de los directivos, lo que los posiciona en un punto de partida más propicio para enfrentarse a los nuevos retos del trabajo.
• Meditar. Cuando un líder reflexiona sobre un asunto, tanto de forma individual como con otras personas, es capaz de conectar diferentes ideas y puntos de vista, reorganizando las piezas de su mente y hallando una solución más eficaz.
• Hacer deporte. Rock también apuesta por el Men sana in corpore sano. Por ello, recomienda a los altos ejecutivos hacer ejercicio físico con frecuencia, como método para oxigenar el cerebro, eliminar toxinas y potenciar la actividad cerebral. De hecho, los profesionales son un 23% más productivos durante las jornadas en las que han realizado algún tipo de deporte.
• Dormir. El cerebro emplea las horas de sueño para reorganizarse, fortaleciendo y estructurando las conexiones originadas en las horas anteriores.

Siguiendo esta línea, el Grupo P&A, consultora de Liderazgo, Formación y Selección de Personal, ha elaborado un ebook ‘Neuroliderazgo: aprovecha el potencial de tu cerebro’, para que profundices en esta materia.

Enlace a la descarga del ebook: http://recursos.grupo-pya.com/neuroliderazgo

Fuentes:
Artículo:  "Neuroliderazgo: aprovecha el impacto de tu cerebro" Publicado en www.observatoriorh.com por Nacho torres el 17-octubre-2016.
URL: https://www.observatoriorh.com/liderazgo/neuroliderazgo-aprovecha-el-impacto-de-tu-cerebro.html

Artículo:  "Neuroliderazgo: aprovecha el impacto de tu cerebro" publicado en Grupo-P&A.
URL: http://recursos.grupo-pya.com/neuroliderazgo